ESPECIAL VUELTA A CLASES CON MAPED. Ya estamos con los últimos días antes de volver a clases y en Maped Docentes proponemos un espacio de diálogo y reflexión. Con esa intención conversamos con tres maestras para que nos den su mirada sobre cómo encarar la adaptación, el regreso al aula y el primer encuentro con los alumnos. En esta primera parte compartimos el valioso aporte de Micaela Cosentino, profesora de Nivel Inicial.
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«Está en nosotros como profesionales generar un vínculo sano«
MD: ¿Qué les espera a las maestras en este primer contacto del año?
Micaela: El periodo de inicio o antiguamente llamado “adaptación” es el primer momento en el que familias, niños y docentes entran en contacto con lo que será el resto del año escolar.
En estos días establecer vínculos de respeto y confianza es clave para generar una relación afectiva entre las familias y los docentes en pos de la educación del niño.
Debemos entender que el inicio a un nuevo ciclo lectivo, a una nueva institución o a un nuevo grupo de pertenencia genera ansiedad tanto en las familias como en los niños y los docentes. Y que el primer encuentro clave para generar este vínculo es la reunión de comienzo de año.
¿Cómo se debe manejar este encuentro?
La primera entrevista, tanto individual como grupal, es valiosa porque ayuda a las familias a conocer cuáles son nuestros objetivos como docentes para ese año y a los docentes nos acerca la posibilidad de conocer a las familias.
Este intercambio será un momento privilegiado que nos ayudará a saciar las dudas y conocer más acerca del niño, su forma de juego, sus rutinas, sus vínculos… También podemos utilizar este espacio para nombrar algunas acciones esperables del periodo de inicio: la angustia, la resistencia o la falta de interés son actitudes que suelen aparecer en los niños durante este periodo. Es clave entender que son propias de esta primera etapa.
¿Qué información no debe faltar en esa reunión?
Explicarles a la familias que la confianza de ellos hacia los docentes y la escuela es fundamental. Será brindarle la seguridad que el niño necesita para avanzar en este cambio que inicia.
Pasado esta reunión y el comienzo de clases, ¿qué actividades son recomendables para compartir con los chicos y chicas?
Una vez comenzado el ciclo lectivo podemos generar algunas actividades que incluya a los padres, en un primer momento, a la dinámica de la sala. Que ingresen al espacio si éste lo permite, que jueguen, que exploren tal como lo hacen los niños, que escuchen las intervenciones del docente. Esas actividades les generan una sensación de familiaridad y de confianza que es necesaria para luego comenzar a despegarse.
¿Y el primer día, qué podemos esperar?
Durante el primer día podemos proponerles a los padres que realicen un dibujo junto a los niños, que hagan un collage o que participen con ellos de una producción donde coloquen sus deseos para este año y luego lo dejen en la sala.
Esta producción puede convertirse en la primer hoja del cuaderno, el calendario de cumpleaños del niño, la hoja que cierre la carpeta, entre muchas otras cosas. Lo importante es que ese aporte esté presente en la actividad cotidiana del niño y la niña y que luego vuelva a la familia.
Poco a poco podremos ir pidiéndoles a las familias que esperen en otro espacio de la escuela que no sea propiamente la sala. Es importante aclararles que deben quedarse dentro de la institución para que podamos localizarlos fácilmente y para que, en caso de que los necesitamos, podamos acudir a ellos para mostrarles a los chicos que las familias los están esperando y que no se han ido.
¿Qué consejos les darías a las docentes que enfrentan este momento con ansiedad?
Como docentes debemos aprovechar estos espacios para generar un momento de encuentro en las familias. El periodo de inicio es el primer espacio para conocernos, conversar y despejar dudas propias de los miedos que genera el inicio de las clases.
Si el grupo de adultos lo permite podemos acercarles distintas propuestas para realizar durante estos momentos. Por ejemplo: podemos pedirles botellas de plástico y brindarles distintos materiales para que lo transformen en un juguete de arrastre para darle a los niños cuando finalizan la jornada, acercarles materiales que pertenezcan a la sala y que puedan restaurar o solicitarles ayuda en la preparación de un material didáctico.
Sería conveniente que durante estos encuentros entre las familias algún docente pueda acercarse esporádicamente y contarles lo que los chicos están haciendo en la sala o responder de forma particular alguna duda.
¿Qué valor le das a esos encuentros con las familias?
Habilitar estos momentos de charla entre las familias para que compartan experiencias, hablen y generen vínculos disminuye la ansiedad de querer saber qué es lo que está sucediendo en la sala.
Es importante que la comunicación entre las familias y las docentes sea fluida. El cuaderno, las charlas antes del ingreso o luego del horario escolar son canales que ayudan a la familias a sentirse acompañadas durante este proceso.
Está en nosotros como profesionales generar un vínculo sano entre las familias y la escuela con el fin de lograr lo mejor para el niño. Aprovechemos el periodo de inicio para hacerlo.
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(Entrevista con Micaela Cosentino profesora de Nivel Inicial).