Entrevistamos a Gisela Duarte, de @artescuela.gi
1- ¿Qué fue lo que te inspiró a ser docente de arte?
Una profunda convicción de que el arte es inherente al ser humano y de que si nacimos con la capacidad de hacer arte es por un motivo más profundo que el estético. Siempre vi el arte no como un fin en sí mismo sino como una herramienta para sembrar semillas que den frutos significativos en la vida adulta.
2- ¿Qué te gustaría que cada estudiante se lleve del espacio de arte?
Me gustaría que sepan que somos naturalmente creadores, como quien nos formó a Su imagen; que cada uno se lleve la satisfacción de ver que puede más de lo que cree, que logre ver que el arte (como la vida) se trata de procesos y que siempre hay tiempo, mientras estemos acá, de explorar, aprender, crear, resolver y buscar la mejor versión de nuestra obra y de nosotros mismos.
3- ¿Qué lugar creés que ocupa el arte en el desarrollo de la creatividad y la expresión en la infancia?
Esta pregunta fue la que disparó el desarrollo de mi tesina. Tuve un momento de crisis como estudiante del profesorado en el que me enfrenté a realidades complejas donde los niños, niñas y adolescentes estaban creciendo con verdaderas carencias. Si bien nunca había estado ajena a esto, ver de cerca esas realidades que eran mucho más crudas que las que yo había atravesado de niña me encontró preguntándose si realmente ser profesora de artes visuales valdría de algo para la sociedad, ¿qué podría significar un cuadro de Picasso para un niño que no ha comido nada en todo el día? El estudio de investigaciones realizadas por profesionales más una profunda convicción de que el arte no es solo una pieza que se cuelga en la pared me llevó a ver que el lenguaje visual no se trata solo de expresión, sino que es una herramienta poderosa en el desarrollo integral de las personas, sobre todo durante la primera y segunda infancia. El estudio del arte visual en todas sus disciplinas colabora sin lugar a dudas con el desarrollo de la capacidad resolutiva (esto es la creatividad) la de observación y de análisis de todo lo que nos rodea y aún de nosotros mismos. La manipulación de herramientas artísticas desde la más temprana infancia es crucial en el desarrollo motor (lo que he comprobado con mi propio hijo que hoy tiene dos años de edad) y el uso de las manos en esto les proporciona una base firme para la posterior adquisición de la escritura. Creo, además, que la variedad de disciplinas y contenidos estudiados con seriedad y compromiso ayuda a los niños a comprender el mundo de una forma realmente integral ya que en el arte hay ciencia, no es solo y medio de expresión estética.
4- ¿Qué importancia tienen los materiales en el proceso creativo de los chicos?
Sin materiales de ningún tipo no es posible crear obras de arte y cuanto más amplio sea el abanico de herramientas más serán, sin lugar a dudas, las posibilidades de exploración y creación.
5- ¿Qué productos Maped usás o recomendás en el aula y por qué?
¡En la sala de plástica tenemos muchos materiales Maped! Utilizamos las tijeras (las recomiendo por su calidad, durabilidad y además por la opción para zurdos), las témperas (tienen un buen poder cubritivo aún los amarillos), los sacapuntas que retienen los desperdicios (a los niños y niñas les encantan los diseños y además colaboramos con la limpieza de la sala) y los lápices de colores reducidos en plástico. Me encantaría poder probar los aerógrafos pero aún no tuvimos oportunidad.
6- Si pudieras definir el arte en una sola palabra, ¿cuál sería?
Es difícil elegir una sola palabra, pero creo que hay una que podría integrar a todas las demás: vida.